Los astronautas, Laura Ferrero

Me encantan los libros que me desestabilizan emocionalmente. Le pregunté a mi psicóloga si esto me convierte en una persona masoquista, y me dijo que no, porque el masoquismo es un acto inconsciente y esto lo hago de manera consciente y voluntaria. Después de navegar un poco por mi mente, llegamos a la conclusión de que disfruto este tipo de libros porque busco respuestas. Quiero encontrar otras familias en esas páginas y compararlas con la mía.

Lo que me sucedió con «Los Astronautas» es que, desde la primera página, sabía que iba a terminar, como mínimo, con un nudo en la garganta y viendo el horizonte y, por supuesto, eso aumento mis expectativas.

La habilidad de Laura Ferrero para atraparte con la narración, es divina y envidiable. Me hizo sentir que estaba sentada a su lado, con un pañuelo destruido que le rogaba piedad a mi nariz. Estuve ahí con ella, sentí su incomodidad, me indigne con los silencios, la acompañé en las dudas, me perdí en las incoherencia. Pude acercarme y ver sus reacciones, detecté cada gesto de dolor, alegría y desconcierto. Me puse en sus zapatos ya que, la verdad, también he vivido en ellos, así que no podía evitar pensar: «te entiendo, Laura, no es justo».

Siempre he pensado que, los libros sobre familias disfuncionales son necesarios; todos deberíamos leer al menos uno alguna vez. De esta manera, los que han tenido una familia hermosa y relativamente «normal» podrán agradecer y valorar lo afortunados que fueron, y los que no tuvimos ese privilegio quizás terminaremos sintiéndonos menos solos, menos raros.

Durante décadas, el acto de romantizar la maternidad y plantear el matrimonio como el final feliz de la historia ha ocasionado múltiples decepciones. Hemos visto mujeres que olvidaron sonreír, hombres que caminan en automático, niños que anhelan ser vistos y finalmente familias rotas, que terminan reencontrándose únicamente en las navidades o en el velatorio de la abuela.

«A los hijos que no han sido vistos, que no han podido pertenecer, les ocurre eso, que creen que su invisibilidad radica en una carencia que es necesario compensar». Laura Ferrero.

Mi psicóloga también me explicó que la figura del padre es como la de un observador. Una persona que intenta encontrar su lugar. Un ser que presencia el poderoso vínculo que se da naturalmente entre madre e hijo. Lo imaginé a mi papá, moviéndose de un lugar a otro, tratando de encontrar un espacio para acercarse y verme a los ojos. Creo que en algún momento perdió el interés y prefirió quedarse detrás de la puerta.

Es la iatrogenia relacional, la que se da entre padres e hijos cuando un progenitor renuncia, voluntaria o involuntariamente, a su misión protectora. Laura Ferrero

«Los Astronautas» es un libro profundo, pero escrito de manera sencilla. Es una historia intensa, con un hilo conductor atrapante. Agradezco la honestidad con la que fue escrito. Se convirtió en un relato que honra la historia real de muchos niños que crecimos con un signo de interrogación en nuestras pequeñas cabezas.

Finalmente, esta lectura me hizo pensar que, podemos pasear por la vida de nuestros padres en el rol de periodistas. Yo lo he hecho (y lo sigo haciendo) y esto me ha permitido conocer algunos aspectos de sus vidas que quizás antes no consideraba. Ver con otros ojos a esa mujer y ese hombre que tomaron decisiones que marcaron mi vida; sin embargo, esto no me ayuda a sanar a aquella criatura que quedó perdida en mitad de la historia. Para lograr eso, es necesario ir a lo más profundo de mi ser, tomarla de la mano y llevarla a un lugar seguro, un lugar que con mucha paciencia he construido, solo para ella.

Lo que brilla , en el cielo, es el pasado. Las historias que miran al pasado solo sirven, en realidad, para poder mirar al futuro. Laura Ferrero.

¿Quieres leer este libro, lo leíste, es el tipo de libro que te gusta? si la respuesta es no, es válido, solo cuéntame, ¿con qué fragmento de esta publicación te sientes identificado? Me encantaría saber de ti.

Te abrazo. Gracias por leer-me.

Majo.